Hoy, 5 de junio, se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente con la mirada puesta en la reducción del uso de plásticos y las ventajas de la economía circular
La educación para un desarrollo sostenible implica el cultivo de competencias verdes, que impulsarán nuevos empleos e ideas con un espíritu empresarial más ecológico y sostenible
El Día Mundial del Medio Ambiente se celebra hoy, 5 de junio, fecha en la que, además, cumple ya 50 años desde que la Asamblea General de las Naciones Unidas decidiese establecerlo. Este 2023 tiene como tema central la contaminación por plásticos, una de las cuestiones más controvertidas de la sociedad actual.
“Más de 400 millones de toneladas de plástico se producen en el mundo cada año, de los cuales la mitad se conciben para una vida útil de un solo uso. Menos del 10% se recicla”, como destaca la Organización de Naciones Unidas (ONU). Esa tasa de reciclaje contrasta con el dato registrado en España, del 27%, como destaca la organización Greenpeace. El cambio de modelo es posible.
La ventaja de la economía circular de los plásticos es su capacidad para ser recuperados y reutilizados como otros recursos, teniendo en cuenta el ritmo de vida actual y la demanda de productos de una población mundial que crece continuamente. Todo ello teniendo en cuenta que una verdadera economía circular implica reducir los residuos al mínimo.
Cambio hacia una Economía circular
Gracias a la economía circular el ciclo de vida de los productos se amplía. Se trata de un modelo de producción y consumo que implica compartir, alquilar, reutilizar, reparar, renovar y reciclar materiales y productos existentes todas las veces que sea posible para aportar un valor añadido.
Entre los beneficios se encuentra la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, ya que actualmente somos responsables del 45% de emisiones de CO2 pero, además, el aumento de la competitividad y la innovación, así como el impulso del crecimiento económico y el empleo. Desde la Unión Europea se estima que se generarán 700.000 nuevos puestos para 2030.
La necesaria transición hacia una economía descarbonizada y respetuosa con el medio ambiente ayudará a frenar el cambio climático y se convertirá, además, en motor de crecimiento, con el impulso del empleo y el emprendimiento verdes en sectores muy diferentes. Por tanto, permitirá la creación de puestos de trabajos asociados a un espíritu empresarial más ecológico y sostenible.
Competencias para el empleo verde
La educación para el desarrollo sostenible pasa por el cultivo de competencias verdes, que tienen que ver con la asunción de principios ecológicos y con la sensibilidad y consciencia de la evaluación de las propias acciones, la adopción de nuevas formas de promover la biodiversidad o la búsqueda de nuevos métodos para un consumo más responsable. Así como todo lo que contribuya a revertir el cambio climático y sus consecuencias.
En España el empleo verde ocupa el 14% del total del empleo y se espera un incremento ante sectores que ya impulsan la economía verde. Una oportunidad para la inserción sociolaboral de colectivos especialmente vulnerables, como ocurre ya en proyectos como la Alianza para la Transición Energética Inclusiva, que impulsamos junto a Fundación Repsol. La primera red multiagente que apuesta por la transición energética como oportunidad para desarrollar soluciones a los problemas laborales y sociales de esos colectivos.
Si se habla de empleo verde en términos de género, el empleo femenino por cuenta ajena en este ámbito ha aumentado de forma importante en España (41,3%), como apunta el Informe “Emprendimiento verde de las mujeres y emprendimiento de las mujeres en el ámbito rural” publicado por del Ministerio para la Transición Ecológica este 2023. El estudio constata la brecha de género que aún existe en el emprendimiento en municipios rurales ya que, de cada 100 personas emprendedoras verdes en estos municipios, solo 6 son mujeres.
Las formaciones especializadas, tanto en empleo como en emprendimiento, facilitan el cambio y la ruptura de esa brecha de género. En iniciativas como Motor Verde o Impulsa Empleo Verde, que desarrolla itinerarios formativos para mejorar la búsqueda de empleo en los sectores con mayor proyección profesional. La educación vuelve a ser el centro de todo, así como lo son las buenas prácticas en empleo y emprendimiento verde que se detectan en otros territorios y que permiten impulsar proyectos con futuro, como detecta Rural Employability Network, la red europea por la empleabilidad rural.
Sectores en auge
Entre los sectores en auge para el empleo verde se encuentra la energía, que alcanzó en 2021 los 12 millones de puestos o la agricultura orgánica, que el pasado 2022 aumentó sus ventas en alimentos y bebidas un 15% a nivel global, según el Instituto de Investigación de Agricultura Orgánica (FiBL). Por otro lado, el sector del transporte, responsable de más del 30% de emisiones de CO2 en la Unión Europea, principalmente en carretera, abre nuevas oportunidades de trabajo con el vehículo eléctrico o el transporte público.
También el turismo ecológico es un ámbito en crecimiento, a través de negocios vinculados con nuevas actividades de aventura, el conocimiento de espacios protegidos y la revitalización de entornos rurales. Se persigue un turismo más seguro y sostenible para reducir el impacto ambiental. Este es uno de los objetivos también del proyecto Territorio Verde.